Para conocer el impacto positivo en el medio ambiente que tiene el uso de los productos y soluciones Pascal Box primero tenemos que conocer algunos aspectos claves del ciclo de vida de las pelotas de tenis y pádel.
número 1
tenemos que cambiar el “chip”
- Actualmente solamente usamos las pelotas en uno, dos o tres partidos. O jugamos más, pero ya con pelotas desinfladas, flojas, sin el bote ni el comportamiento adecuados.
- Y esas pelotas que desechamos todavía tienen un montón de vida útil ya que el caucho y la felpa están en perfectas condiciones.
- Las tiramos porque están desinfladas. Es como si tirásemos a la basura un balón de fútbol o baloncesto sólo porque se ha desinflado.
- No damos ningún valor ni importancia a las pelotas, ni a todo lo que implica en cuanto a materiales, recursos y energía empleados en su fabricación y transporte.
- Usar un producto un par de veces y tirarlo a la basura cuando está en perfectas condiciones es un comportamiento irresponsable e ineficiente. Desperdiciamos materiales, energía, dinero y generamos residuos y contaminación de manera totalmente innecesaria.
número 2
un largo viaje de alto impacto
número 3
cerrando el círculo
- Hoy en día hay muy pocas iniciativas de reciclaje de pelotas de tenis y pádel en todo el mundo. Pero cada vez están surgiendo nuevas.
- Algunas se centran en recogida de las pelotas para darles un segundo uso para calzar sillas o mesas en colegios. Otras logran separar la felpa del caucho y consiguen reciclar el caucho para fabricar nuevos productos como pistas de tenis, parques infantiles, chanclas e incluso ropa. Por último, otras consiguen transformar el caucho en nueva forma de combustible a través de procesos químicos.
- Pero la inmensa mayoría de las pelotas siguen acabando en vertederos o incluso en nuestros bosques, ríos y mares.
el cambio
Estos aspectos claves son los mismos sobre los que reflexionamos al principio de todo.
Y las conclusiones que obtuvimos fueron las que nos impulsaron a crear la empresa. Y, a día de hoy, siguen siendo el motor gracias al cual seguimos innovando, realizando mejoras y buscando nuevas soluciones de manera permanente.
A lo largo de estos años hemos ido desarrollando una filosofía de empresa que construye un compromiso irrenunciable con la producción y consumo responsable, la economía circular y la protección del medio ambiente.
Diseñamos y construimos para durar: Todos nuestros productos han sido diseñados y construidos para durar muchos años, e incluso toda una vida como el Pascal Box PRO.
Están fabricados con materiales de alta resistencia. Sus componentes son robustos y de máxima calidad.
Obviamente los materiales sufren desgaste con el uso y se pueden dañar o romper por un golpe o una caída. Por eso todos nuestros componentes y elementos son fácilmente reparables, o sustituibles con un coste muy reducido.
Nuestros productos no están fabricados con materiales baratos de baja calidad, no son productos de usar y tirar cuando sufren daños.
Nuestros productos son sólidos y robustos y se pueden reparar para prestar servicio y garantizar resultados perfectos durante años y años.
entonces!!!
¿Cuál es el impacto positivo que logramos usando los productos y soluciones Pascal Box?
- En el inicio del ciclo de vida de las pelotas: Al conseguir extraer toda la vida útil real de las pelotas (y además con rebote y rendimiento perfecto en cada partido y entrenamiento) reducimos el número de pelotas que se fabrican anualmente (más de 360 millones) con la consiguiente reducción en el consumo y fabricación de materiales sintéticos, reducción en consumo de energía y de emisiones de CO2 a la atmósfera.
- En la parte central del ciclo, la de su uso, conseguimos que se alargue enormemente el periodo de trabajo hasta su potencial real, siempre con el rebote y rendimiento perfectos. Podrás usar tus pelotas durante decenas de partidos y durante muchas semanas, incluso meses, independientemente de cuándo abriste el bote por primera vez.
- Al final del ciclo: Estamos desarrollando un proyecto colaborativo internacional con clubes, empresas de diferentes sectores, federaciones e instituciones públicas y privadas, para poner en marcha sistemas eficientes de recogida y reciclaje para así poder crear un verdadero sistema de Economía Circular para las pelotas de tenis y pádel.
Hasta ahora no hemos dado ningún valor a las pelotas, eran un producto de usar y tirar. No éramos conscientes de la forma irracional e irresponsable de cómo usábamos y consumíamos las pelotas de tenis y pádel. Y mucho menos del enorme impacto medioambiental que suponía.
Está en nuestra mano cambiarlo. Ya no hay excusa. Podemos corregir ese comportamiento y además ahorrar dinero y disfrutar de la mejor experiencia de juego, desde el primer partido hasta el último, usando pelotas con la presión y bote perfectos.